martes, 6 de abril de 2010

EL DEPORTE EN ROMA

El deporte en Roma incluís algunas pruebas atléticas de clara influencia griega. Así, se practicaban el salto de longitud y el de altura -éste no realizado por los griegos-, el lanzamiento de disco, etc.
Pero quizá el preferido era la carrera, pues se medía el rendimiento humano a base a ella. Incluso emperadores como Augusto solían cerrar sus ejercicios con la carrera. Se daban tanto la carrera individual como la de relevos, en la cual los atletas se entregaban una antorcha encendida. Se disponía habitualmente de bordillos de salida y se entrenaban diferentes técnicas de salida, lo que demuestra el nivel de sistematización al que llegó el ejercicio físico en esta época.
El salto de longitud se realizaba con halteras, al estilo griego. Además, éstas se utilizaban para realizar entrenamientos de fuerza, introduciéndose así un modelo similar al actual de entrenamiento con pesos. Aparte de los saltos de competición, también se realizaban otros, como los "saltos brincadores", según la denominación de Séneca, o los saltos en profundidad, con la única finalidad de servir de entrenamiento para aumentar la potencia de salto. Se puede considerar, por tanto, que esta época es un claro antecedente de métodos de entrenamiento como el pliométrico del siglo XX.
El lanzamiento de disco y jabalina también eran habituales en Roma. El disco parece que gozaba de cierta preferencia -igual que en Grecia-, y entrenaba no sólo la fuerza sino también la elasticidad, por los movimientos de torsión que debían imprimirse el cuerpo. La jabalina era entrenada al mismo tiempo por su carácter deportivo y por simple practicidad, pues las lanzas seguían siendo utilizadas en los combates.
Los deportes más adecuados para las clases altas eran los ecuestres. Posiblemente existía ya en esta época un entrenamiento sistemático que incluís, además de la enseñanza habitual, auténticas acrobacias como saltar de una montura a otra, realizar equilibrios sobre el caballo, etc.

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